Alan Moore en la calle Montera

Es sencillo convertir a la popular calle Montera en la tenebrosa Whitechapel de Jack el Destripador. Tiene incluso al doctor Gull en su funesta carroza.


En su número 26, existe un enorme y sorprendente mural, obra del cartelista y pintor Alberto Pirrongelli, que es casi como una viñeta extraída de From Hell de Alan Moore: una carroza marcha a toda velocidad, el tétrico conductor, látigo en mano, avanza por la calle Alcalá entre tranvías, coches a caballo y parejas tomadas de los brazos paseando tranquilamente. Al fondo vemos el edificio de Gobernación. Por eso tiene mucho sentido que enfrente de esta, cruzando la calle, se halle una tienda de discos llamada «Killers».

Sumérgete en el mejor Alan Moore con Ángeles fósiles.