El increíble dibujante que cambió la industria del cine


El holandés Frans Bosen cambió para siempre los carteles de cine, que convirtió en grandes obras de arte, como el que hizo para Fausto o El fantasma de la ópera, entre muchos otros

 

Desde niño Frans Bosen quería convertirse en dibujante. Asistió a la Escuela de Artes Aplicadas del Estado en Ámsterdam y a clases en la Academia Nacional de Bellas Artes. Bosen trató de mejorar sus habilidades en el dibujo de cualquier forma. Cuando el artista J. G. Veldheer comenzó a dar clases en la Escuela de Gráficas en 1921, Bosen estaba allí todos los sábados por la tarde.

Bosen comenzó a trabajar en De Brakke Grond en Ámsterdam a principios de la década de 1920, llegando a ser uno de los primeros en Holanda en crear diseños de carteles de películas. Antes de aquella época generalmente los carteles de películas eran composiciones de letras. Los anuncios cinematográficos llevaban solo texto y se anunciaban varias películas al mismo tiempo. Bosen, con su increíble arte, cambió eso. Por lo que sabemos, hizo 158 carteles para famosas películas estadounidenses y alemanas, como Robin Hood (1922), El ladrón de Bagdad (1924), El fantasma de la ópera (1925) y Fausto (1926), entre muchos otros. Para sus carteles, creaba su propia tipografía. Como la impresión en color aún era problemática, Bosen hizo uso del linograbado, con el que logró muy buenos resultados.

Además de carteles de películas, también diseñó otros materiales impresos publicitarios a lo largo de los años veinte. Hizo calendarios para varias compañías, que decoró con coloridos peces, pájaros, plantas y motivos florales. A principios de mayo de 1933 se unió a la compañía de impresión De Spaarnestad. Esta imprenta publicó un folleto en 1939 titulado El proceso, que estaba dedicado por completo al trabajo y la tecnología de Frans Bosen. Bosen trabajó en varias tareas en De Spaarnestad. Entre otras cosas, realizó el diseño de los libros de aniversario y Navidad, así como diseñó las portadas de la serie Dwars door Nederland. También diseñó libros de textos y revistas.

En 1945, De Spaarnestad publicó el libro de fotos Nederland en Beeld (Pictorial Holland), para el cual Bosen había sido el fotógrafo. Hasta su muerte en 1949, permaneció empleado en la imprenta Haarlem.

Sus carteles de cine y otros impresos publicitarios se encuentran ahora en el archivo de carteles del Netherlands Film Museum en Ámsterdam. Los carteles de cine que diseñó pertenecen al archivo del Museo Stedelijk en Ámsterdam.