Check It! La banda de gays y trans que devuelve golpe por golpe

Cerca de doscientos gays, lesbianas y trans de Washington DC plantan cara a los agresores y van a por ellos. Se llaman Check It y Steve Buscemi o Debbie Harry se han rendido ante ellos.

En alguna que otra ocasión hemos hablado en Agente Provocador de los grupos de autodefensa formados por gays y lesbianas en el San Francisco de finales de los ochenta y primeros noventa. En aquella ocasión, inspirados por los Pink Panthers (gays, lesbianas y queers que, tomando como modelo a los Black Panthers, formaron patrullas de autodefensa para oponerse a la violencia neonazi), narramos las aventuras y desventuras de ser gay y lesbiana en Estados Unidos, donde en muchos casos estás expuesto (al igual que en buena parte del mundo) a violencias de toda clase.

Washington D.C. tiene alguno de los barrios más peligrosos de la costa este. Sobrevivir en muchos de sus barrios es una hazaña. Trinidad, al noreste del D.C., en 2009 sufrió una oleada de agresiones contra gays y trans protagonizadas por grupos ultras. No había sido la primera agresión, pero sí la que colmó la paciencia y cambió la resignación por la acción, destruyendo el mito que asegura que gays, lesbianas y trans son incapaces de hacer frente físicamente a sus agresores. Inmediatamente, aquellos que sufrían casi a diario palizas, decidieron salir juntos, armarse con cuchillos y sprays de autodefensa e ir a por los agresores. Se llamaron Check It y desde entonces no han parado. Años después, cuentan con cerca de doscientos miembros, siendo la única banda LGBTQ de Estados Unidos dedicada a la acción directa y la autodefensa violenta formada por gays, lesbianas, trans y queers. «Only Gay Gang in USA», es lo que han contado los principales periódicos, aunque la mayoría son transgénero y queers. Los combates son cuerpo a cuerpo, en mitad de la noche, a muerte.

Check It es, igualmente, el nombre del exitoso documental dirigido por Dana Flor y Toby Oppenheimer que retrata la vida cotidiana de algunos de los integrantes de la banda, muchos de los cuales han acabado en prisión o fallecido como consecuencia de las continuas reyertas, algunas de las cuales aparecen en el tráiler de una película que ha contado con el apoyo de Steve Buscemi, Stanley Tucci o la fundadora de Blondie, Debbie Harry, entre otros. También cuentan con el apoyo de The Jack Kemp Foundation.

La existencia de Check It ha sido un secreto a voces. La mayoría son afroamericanas que llevan una vida dura y precaria. Muchos y muchas son prostitutas. También muchos tiene historiales de adicción a las drogas y, en no pocos casos, de superación. Muchas se mantienen físicamente fuertes y mantienen un enorme grado de cohesión. Como cualquier banda urbana, su principal fuerza es la unidad y lealtad. Cada integrante de Check It protege al otro, incluso cuando caen presos, como cualquier otra banda. El crack se ha cebado con muchos de ellos, contando historias de tragedia y desastres familiares. Han tenido choques en los gentrificados barrios de Chinatown y Gallery Place, y comenzado una modesta marca de ropa llamada Check It Enterprises Inc.: «Haciendo dinero legal no tienes que prostituirte o cometer crímenes peores para poder comer», afirmaron al Washington Post.

Por el momento, el estreno del documental, al que fueron invitados y fotografiados muchos de ellos, ha visibilizado un fenómeno que quizás prenda en otras ciudades del país. El legado está ahí. Los chicos y chicas LGBTQ lo saben.